viernes, 3 de febrero de 2012

-3ºC

Acabo de llegar de Elda, habían exactamente -3ºC. Sí, frío, mucho frío. He corrido hacia el coche con la musiquilla de la película todavía resonando en mi interior. Una musiquilla que evoca calidez...
Aquí en Novelda, estamos a -2ºC...
Hoy ha sido un buen día, de esos que cojo las riendas de mi vida, sin importar nada más y sin acribillarme a mí misma a preguntas. Hoy he mirado por mí, todo el día.
- Qué vas a hacer hoy?
- Ir al cine
- Con quién?
- Conmigo
Ojos como platos...boquita de piñón... Llevo viendo esta expresión dos días, y no he caído en convencionalismos. Yo estaba convencida que, podía hacerlo, que me vendría bien y he llegado con ello hasta el final con óptimo resultado. Me he encontrado con un grupo de antiguos amigos, dos veces me ha preguntado la chica de las taquillas cuántas entradas quería...
No he visto una película de rayos láser, extraterrestres o grandes efectos especiales. He visto una película, de las que a mí me gustan, sencillas, con trasfondo e historias.
Hoy me he metido de lleno en Katmandú, dejando varias lágrimas a puertas de lagrimal.
Me ha hecho reflexionar, por qué si mi límite es el cielo, sigo anclada al suelo. Por qué, si yo me lo propusiera en serio, podría ver montañas, ríos nuevos, podría ayudar gente. He salido llena de vida. He salido llena de fuerza y con ganas de luchar por mí. Porque, como tantas veces me repito, mis límites, me los pongo sólo yo, por lo tanto, también puedo quitarlos.
Por qué siento más mi tierra, la extranjera que la propia? Por qué siento como si ya hubiese estado en sitios que jamás he pisado? Y qué hermosa y aterradora sensación...
A aquellos, que creen conocerme, a aquellos que día a día me dicen qué es lo más correcto, lo más adecuado, lo más beneficioso para mí... No, chicos, no me conocéis... cómo podéis conocerme si a penas me conozco yo? Es ahora, con veintiocho años, cuando me quedo solas conmigo misma, cuando escucho mi voz, que tímidamente, empieza a hablarme de mí y me gusta lo que oigo. Me sorprendo a mí misma de lo que puedo conseguir, de quién soy de verdad. Y cada día, me parezco más y más hermosa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario