miércoles, 26 de octubre de 2011

De cera derretida en mis dedos...

Fuera ya empieza a hacer frío, pero yo olvido hasta la chaqueta, y salgo a la calle, donde recibo asombrada una bofetada de aire frío.
El sofá se ha quedado tan grande... pero me siento asombrada de lo a gusto que me siento, viendo una película no comercial, mientras bebo té y paladeo con sumo placer dátiles. Fuera, ya empieza a hacer frío, pero aquí en mi sofá, se está caliente. Yo me siento cálida... estoy en paz... Es agradable.
Y mientras todo ésto ocurre, derrito cera entre mis dedos y la esparzo, la moldeo; observo mi alrededor con nuevos ojos y lo moldeo a mi antojo, es tan agradable reír, canturrear sin pensar, verme en el espejo y sonreír...
Y mientras esto ocurre, veo cómo la ávida llama devora la cera, haciéndola caer sobre mis yemas, caliente, sedosa...y la deslizo, moldeándola con extremo mimo...
Cera, derretida en mis dedos, mientras la llama devora el tiempo...

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